En Universal Robots ya te hemos hablado de la robótica colaborativa como una de las tecnologías indispensables de la cuarta revolución industrial. Precisamente la Industria 4.0 se caracteriza por la digitalización de las líneas de producción y fabricación a través de la realidad virtual, la inteligencia artificial (IA) o el internet de las cosas.
En base a ello, hoy queremos ir un paso más allá para mostrarte cómo la inteligencia artificial aplicada a la robótica supone una búsqueda continua de la perfección en la producción, y los cobots son un buen ejemplo de cómo alcanzar los objetivos.
¿Qué es la inteligencia artificial?
Aunque el término de inteligencia artificial lo acuñó John McCarthy en 1956 y lo definió como “la ciencia e ingenio de hacer máquinas inteligentes, especialmente programas de cómputo inteligente”, lo cierto es que comúnmente se entiende como la combinación de algoritmos que buscan la creación de máquinas que presenten las mismas capacidades de un ser humano.
Por su parte, la aplicación concreta de la inteligencia artificial a la robótica tiene como objetivo que los robots puedan realizar tareas de forma autónoma, pero no solo en lo que a la propia acción se refiere, sino también a que sean capaces tomar decisiones sobre qué hacer en un entorno determinado de trabajo bajo unos parámetros preestablecidos.
En este sentido, los cobots son un buen ejemplo de cómo la inteligencia artificial puede acelerar los procesos para lograr la perfección en la producción, ya que son mucho más que tan solo máquinas que realizan el trabajo más arduo, aburrido o peligroso. Pero ¿cuáles son las aplicaciones prácticas de inteligencia artificial que pueden realizar los robots colaborativos?
Aplicaciones prácticas que pueden realizar los cobots dotados de IA
Los cobots son mucho más sencillos de utilizar que las soluciones de automatización tradicionales. Ya te mostramos las diferencias entre un brazo robótico y un robot industrial, pero es que además, pueden desarrollar aplicaciones prácticas de inteligencia artificial. ¿Cuáles son aquellas que pueden contribuir a lograr la perfección en la producción?
1. Monitoreo
Un cobot controlado por inteligencia artificial puede detectar gracias a esta aplicación de monitoreo condiciones cambiantes de espacio en el lugar de trabajo. De esta forma podrá monitorear, es decir, recoger, analizar y utilizar la información para optimizar su funcionamiento.
Para desarrollar esta aplicación con la máxima eficacia es fundamental medir y calcular los resultados del cobot a través de los Indicadores clave de rendimiento o KPIs, es decir las métricas que se utilizan para controlar el rendimiento en una línea de producción. En este sentido, los KPIs son esenciales para monitorear el cobot y guiarle en las decisiones que le ayuden a obtener el máximo rendimiento.
2. Visión artificial
Las ventajas y aplicaciones de la visión artificial en los robots colaborativos son tan importantes que les permite realizar tareas impensables hasta ahora. Un cobot dotado de visión artificial -es un subcampo de la inteligencia artificial- podrá, entre otras acciones, detectar y reconocer la presencia y orientación de un objeto o pieza, realizar tareas de inspección y selección, así como analizar los resultados de una operación y tomar las decisiones correspondientes.
En Universal Robots contamos con una amplia gama de soluciones de visión artificial, desde un simple guiado del robot, hasta los sistemas más sofisticados para complejas aplicaciones industriales como son el empaquetado, paletizado, montaje y un largo etcétera.
3. Adaptación
Un robot colaborativo dotado de inteligencia artificial puede ajustar la orientación de la tarea a medida que el resto de las máquinas se mueven. Además, también son capaces de controlar la fuerza requerida para una aplicación concreta como puede ser la de pick & place, o detectar una posible colisión y evitarla consecuentemente.
4. Aprendizaje
Gracias a los conocimientos adquiridos, un cobot puede predecir y diagnosticar errores en la producción mediante la identificación automática de los patrones de las tareas que esté realizando. Todo ello con el objetivo de lograr un mejor rendimiento.
5. Implementación
Esta es una de las principales ventajas de la inteligencia artificial aplicada a la robótica, y es que un cobot puede comenzar a realizar una primera tarea en poco más de una hora, sin necesitad de la ayuda de programadores informáticos o personal externo especializado. Además, los robots colaborativos pueden hablar entre ellos gracias la comunicación inteligente que aumenta su eficiencia permitiendo el intercambio de cualquier flujo de datos.
6. Supervisión de maquinaria
Por último, y no menos importante, un brazo robótico dotado de inteligencia artificial puede realizar aplicaciones de supervisión de maquinaria, controlándolas, organizando tareas y mejorando la eficacia de equipos cercanos. Y es que los cobots de Universal Robots son compatibles con todas las aplicaciones de supervisión de maquinaria.
En definitiva, la inteligencia artificial aplicada a la robótica colaborativa se traduce en mejoras significativas de los procesos productivos como pueden ser:
- Detectar que algo no funciona bien en la línea de producción y detener la actividad.
- Identificar mejoras en la forma en la que se realiza una determinada tarea, lo que significa una plena optimización.
- Recopilar datos y analizarlos para ayudar en la toma de decisiones para la mejora de los procesos.
Todo ello gracias a un aprendizaje automatizado que hace que las tareas se realicen de una forma rápida, eficiente y productiva. Y con la ventaja de poder trabajar codo con codo con los operarios, mejorando así las ventajas competitivas de tu negocio.
Si te ha gustado esta información y quieres saber más sobre cómo lograr la perfección en la producción gracias a la integración de la inteligencia artificial en la robótica, sigue todas las novedades en nuestro blog.