Optimizar la producción, mejorar el rendimiento de los recursos y que todos los procesos se coordinen para aumentar la calidad del producto final son los objetivos principales que toda industria persigue para hacer frente a la competitividad en el mercado.
Para ello, es necesario contar con la innovación necesaria para poder adaptarse a las necesidades del mercado y, en este sentido, la automatización industrial es el factor clave para programar procesos productivos más veloces, precisos y adaptativos.
Todo esto también implica priorizar otros elementos claves en una industria, como son crear espacios de trabajo seguros y que faciliten la colaboración y coordinación entre máquinas y humanos, sobre todo para la realización de tareas de supervisión y control de la producción.
Para este tipo de tareas, las máquinas de control numérico (CNC) son las herramientas claves que facilitan que este sistema de control se aplique a diferentes robots industriales, contando con la ventaja de que son fácilmente reprogramables y adaptables para operar con diferentes tipos de máquinas y sistemas periféricos y actuar como guías de visión.
Robots CNC: las máquinas de control más eficientes
Para entender todas las posibilidades de una máquina de control numérico es importante entender cómo funcionan estos sistemas de control y las ventajas que aporta un sistema de control numérico, tanto en el ámbito industrial, como en otras actividades de menor envergadura o complejidad.
La automatización de procesos industriales en los años 90 sufrió una gran revolución con la introducción de microprocesadores capaces de cubrir diversas tareas con gran efectividad, no solo por la personalización y posibilidades de adaptar su programación, sino también por introducir relevantes funcionalidades avanzadas, como la comunicación digital o la programación gráfica interactiva que mejoran la monitorización de los movimientos que realiza una máquina y la supervisión de cómo manipula las diferentes piezas industriales.
Por tanto, sin importar de si se trata de maquinaria estática o portátil, el control numérico computarizado puede actuar supervisando y ajustando al detalle variables como la velocidad, posición o precisión de diferentes acciones, como el corte, pegado o ensamblaje de piezas.
Para actuar de tal forma, un robot CNC responde según las coordenadas de posición de los brazos robóticos en relación a las piezas, es decir, que de alguna manera actúa como un GPS que supervisa desplazamientos y movimientos.
Tras el procesamiento de todos estos datos y coordenadas, un controlador CNC pone en marcha sus sistemas de accionamiento y convierte las instrucciones recibidas en señales eléctricas que ejercen acciones o movimientos secuenciales sobre la máquina y el manejo de los productos.
Aplicaciones robóticas para máquinas de control numérico
En el caso de los sistemas diseñados por Universal Robots cuentan con diversas ventajas que pueden marcar la diferencia en el planteamiento de un proceso industrial.
Una de las más destacables es introducir funcionalidades que permitan una programación exacta, como en el caso de la velocidad o fuerza de acción, pudiéndola modificar de forma automática e instantánea ante la presencia de un trabajador, de manera que el profesional puede operar de forma segura y reduciendo los riesgos de accidente.
El diseño compacto y la reprogramación de los robots CNC facilita su aplicación en cualquier tipo de máquina, de manera que la instalación también se puede realizar de forma rápida y sencilla, sin que esto acarree costes adicionales.
La tecnología de Universal Robots integrada en los sistemas CNC tampoco pasa por alto el impacto medioambiental de las tareas productivas, de manera que la eficiencia energética de la maquinaria sea posible, además de ayudar a que la generación de desperdicios y el aprovechamiento de los recursos y materiales sea mayor.
Empresas que cuentan con soluciones robóticas CNC
La mayor velocidad y precisión que consiguen los sistemas de control CNC mejoran la fiabilidad y calidad de los procesos productivos y productos, por lo que no es de extrañar que diferentes tipos de industrias vean relevante el invertir en este tipo de automatización de las tareas de supervisión.
Son muchos los casos de éxito que la tecnología CNC ha hecho posible, sobre todo en industrias que actúan en entornos flexibles y su capacidad de reacción determina la competitividad de la empresa y su posicionamiento en el mercado.
Es el caso de la industria de mobiliario RSS, necesitaba aumentar la eficacia de su producción para atender a un crecimiento de la demanda. Para superar tal reto, RSS optó por invertir en un brazo robótico UR5 con un controlador CNC responsable de ajustar la velocidad de producción según las necesidades.
Para la industrial del metal Thiele un robot personalizado hizo factible que una empresa de tamaño mediano pudiera invertir en una tecnología que ayudara a aumentar la producción, sin realizar una inversión muy alta y sin llevar a cabo procesos muy complejos de instalación y formación de los operarios.
Con esto han conseguido que un sistema automatizado pueda seguir produciendo durante la noche sin interacción humana. Contar con un robot CNC permite que también se encargue de la supervisión de la maquinaria, por lo que este brazo robótico se encarga de todas las tareas de fresado de forma más eficiente.
La flexibilidad de este tipo de robots colaborativos hace posible que cualquier tipo de empresa e industria se pueda plantear la automatización de procesos para aumentar su eficiencia y ser más competitiva.