Automatizar procesos mediante la robótica colaborativa es de gran utilidad para hacer un uso más eficiente y sostenible de los recursos. Este es un objetivo que persigue cualquier empresa que quiere ser más competitiva y rentable, pero sin dejar al margen los efectos que su actividad provoca en el entorno.
Porque, si algo nos está enseñando la situación de emergencia climática, es que todo cuenta a la hora de cuidar el planeta y que todos podemos cambiar formas de producir y consumir para frenar los daños colaterales de años de despilfarro y contaminación.
¿Cómo la robótica colaborativa ayuda a una empresa a ser más amable con el planeta?
Cuando hablamos de la eficiencia y sostenibilidad que un cobot aporta a una empresa, destaca por el uso más inteligente posible de los recursos y la menor generación de efectos negativos, gracias a su exhaustividad y el manejo de datos que le permite crear modelos predictivos.
A nivel planeta, esto se traduce en el empleo de una herramienta de producción automatizada que prima el ahorro, la seguridad y, como robot colaborativo, mide y controla los efectos que su actividad tiene en el entorno: temperatura, emisión de gases, productos desechados, …
Por lo que no cabe duda de que la robótica colaborativa cuida de que la producción industrial tenga en cuenta al medio ambiente facilitando:
Mayor aprovechamiento de los recursos
Las soluciones automatizadas inteligentes son muy demandadas en las cadenas de producción de todo tipo de sectores porque están capacitadas para aprovechar mejor todos los consumibles con los que trabaja.
Un ejemplo lo encontramos en la aplicación de la robótica colaborativa para tareas de soldadura, donde el cobot hace un uso más inteligente del material adhesivo, gastando menos materias primas. Al realizar la tarea con mayor precisión y menos errores, también se reduce la cantidad de producto desaprovechado. Y ocurre lo mismo si hablamos de aplicaciones de corte, montaje o acabado.
Trabajando con menor margen de error y reduciendo la cantidad de productos defectuosos o sobrantes, se generan menos residuos lo que permite que las repercusiones negativas de una producción en el planeta sean menores y más controladas.
Inversiones de larga durabilidad
Una de las aplicaciones más rentables de la robótica colaborativa se centra en el machine tending, es decir, en el cuidado y atención de la maquinaria para asegurar que la cadena de producción siempre funciona en perfectas condiciones y, con ello, garantizar una larga vida útil de las máquinas.
Junto a esto, los kits de aplicaciones son valiosas herramientas que ayudan a que un cobot trabaje de forma más precisa y reduciendo las tareas de mantenimiento que pueden surgir por su labor constante o el contacto con materiales dañinos.
Incentivar las producciones locales
Reducir la huella ecológica de la producción también es muy importante para la sostenibilidad, y las empresas lo comienzan a priorizar. La accesibilidad de los cobots para pymes y empresas locales facilita que cualquier producción pueda ser competitiva, mientras está cerca de sus clientes y genera riqueza en la economía local.
Automatización al servicio del planeta
La robótica colaborativa se concibió como un aliado de la fuerza de trabajo humana porque le ayuda a desarrollar procesos productivos en un entorno más seguro, flexible y eficaz.
Así que, no solo libera a los humanos de tareas repetitivas y peligrosas, sino que le da la oportunidad de emplear su creatividad para explotar el potencial de los cobots para crear un mejor entorno productivo.
De esta manera, empresas referentes en I+D pueden emplear más recursos, plantilla y soluciones de automatización para innovar con nuevos materiales de mayor durabilidad, biodegradables o diseñar sistemas de producción circular.
La robótica colaborativa está al servicio del planeta porque es un facilitador para que las industrias obtengan mayor control sobre la producción y pueden emplear este poder para crear de forma más consciente, convirtiendo la sostenibilidad y el cuidado del planeta en valores diferenciales con los que perdurar su actividad.